miércoles, 25 de diciembre de 2019

LAS JUGADAS DE FIN DE AÑO.


Un emprendedor es por definición alguien que conoce muy bien su empresa, pero muy poco su propia contabilidad, el cierre del año es el momento propicio para conocerla o por lo menos interesarse en ella.


7 COSAS QUE DEBE HACER  O NO HACER ANTES DEL 31 DE DICIEMBRE.



1)  Legalizar los gastos. Es común que durante el año se hagan una gran cantidad de anticipos a proveedores y por no contarse con las facturas soportes, no pueden incluirlos como un gasto deducible, esto quiere decir que su empresas terminará con más impuestos que el que tiene el negocio en realidad. Verifique anticipos y solicite las facturas.


2)   ¿Es el momento adecuado para comprar o para vender?. Diciembre es un mes muy activo en las Notarias, en tanto muchas personas pretender salir de sus activos antes de terminar el año,  ya que el impuesto de renta se paga de acuerdo a los balances del 31 de Diciembre. Si es para vender, planee el ingreso que va a recibir y sus consecuencias tributarias.


3)  Cobrar cartera. A la DIAN no le importa quién tiene su dinero, siempre que se haya facturado deberá pagar por su ingreso, lo triste es que además de tener  que adelantar el IVA  por su cartera tendrá que financiar el impuesto respectivo.


4)   Deudas de los socios con la sociedad.  A los emprendedores les encanta anticiparse utilidades, de tal manera  que en el activo de la sociedad figuran muchas cuentas de los socios con ésta. Estas obligaciones generan un interés presunto que afecta los ingresos y que los contadores suelen olvidar.


5)  Liquidación de nomina.  El cambio de año supone revisar que se hayan adoptado las medidas necesarias para que la provisión de nomina sea la correcta, es decir, se haya dispuesto del dinero suficiente para vacaciones, cesantías y liquidaciones en los casos de los contratos a término definido que finalizan con el año.


6)  Cambio de contabilidad.   Nadie debe cambiar de contabilidad antes de terminar el año, pues ningún contador se anima a  tomar  y certificar unos balances sobre los que no tienen ningún conocimiento.  Si va a cambiar de servicio o de persona, tenga en cuenta que el anterior entregue una proyección de la declaración de renta y deje suficientes copias de los balances firmados pues después,  pueden ser prácticamente imposible encontrarlo.


7)  Capital de la compañía. El final del año no es el momento propicio para hacer un aumento de capital.  Al ingresar o inyectar más dinero a la compañía, aumentan los bancos en el balance, y con ello los activos totales, sobre los que se paga más cara la renovación de matrícula mercantil.




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